El lobo al cuidado del gallinero

El negocio del reciclaje mueve millones de euros solo en España y Ecoembes es el organismo encargado de gestionarlo
No hay que desviarse del tema principal que es evitar que los residuos generados no vayan a parar al Medioambiente, por lo que independientemente de la gestión que se haga de los residuos, nosotr@s también tenemos parte de responsabilidad
Se supone que todos estamos de acuerdo en que, debido a la generación de residuos que producimos y que se va incrementando año a año por nuestra forma de vida (necesitamos que al comprar un plátano esté envuelto en un trozo de plástico, no nos sirve con su propio envoltorio natural), es necesario un sistema que asegure la correcta recuperación y reciclaje de todos esos residuos. En nuestro país contamos desde el año 1996, con la entidad ECOEMBES, que agrupa a más de 12000 empresas envasadoras y distribuidoras, cuya función es realizar la recogida selectiva de los residuos generados por los productos que sus asociados nos venden y finalmente se convierten en residuos. Cuenta con empresas como Nestlé, L’Oreal, Coca-Cola, Pascual, Pepsico, Bimbo, Campofrío, Nueva Pescanova… además de todas las cadenas distribuidoras como Carrefour, Mercadona, Alcampo, El Corte Inglés, etc…. y así hasta las 12000 empresas que componen Ecoembes.
ECOEMBES, que agrupa a más de 12000 empresas envasadoras como Nestlé, L’Oreal, Coca-Cola, Pascual, Pepsico, Bimbo, Campofrío, Nueva Pescanova…
No es muy aconsejable poner al lobo a cuidar las ovejas y, menos aún, cuando el lobo tiene mucho apetito. Esto es muy viejo, para resolver un problema, primero tienes que crearlo y así salir ganando porque tu eres (¿casualidad?) la solución. Todo esto viene a cuenta del informe “Hablan basura, el manual corporativo de soluciones falsas a la crisis del plástico” publicado por la Fundación británica ‘Changing Markets’ para conocer si son efectivos los sistemas de reciclaje y por qué lo son o no. En el caso de España, señalan que organizaciones como ‘Ecoembes’ utilizan “metodologías muy cuestionables”, “actúan como lobby ejerciendo una influencia indebida”para evitar la implantación de otros sistemas alternativos al suyo. Pero es que va más allá, hablando de España como un “lobo con piel de cordero” o denunciando que los datos sobre el plástico en España son basura” (pag. 55) ya que no es clara la metodología utilizada, o no hay fuentes alternativas al Ministerio de Transición Ecológica o la propia Ecoembes.

Una forma de evitar el aumento de la basuraleza es disminuyendo el consumo de plásticos. FOTO: CC

Países como Canadá, Países Bajos, Suecia, Alemania, parte de Australia, Bélgica, Finlandia o Lituania utilizan el Sistema de Depósito, Devolución y Retorno (SDDR) y han comprobado la efectividad y el apoyo de la ciudadanía a esta iniciativa. El SDDR consiste en algo muy sencillo: es como cuando ibas al lechero con tu propia botella y solo te cobraba la leche; pues si no tenías esa botella, se te prestaba dejando una cantidad de dinero para asegurar su retorno. En la actualidad ya nos están cobrando por la botella, pero no se nos devuelve ese depósito, pero lo tenemos que devolver al contenedor amarillo. No parece una idea muy descabellada que en vez de depositarla en dicho contenedor, pudiéramos llevar la botella a una máquina que nos devolviera la fianza que habíamos pagado y así evitar que el plástico vaya donde no debe. Y si por alguna razón no queremos llevarla a esa máquina, siempre habrá alguien interesado en llevarla y recuperar así ese dinero.

Según los datos de reciclaje de envases en los países donde ha sido implantado el SDDR, la recuperación se eleva hasta el 98% como en Alemania, mientras que en España estaría en un 70% según Ecoembes (recordemos, organismo encargado de esta tarea), mientras organizaciones como Greenpeace lo sitúan en un 25.4%.

Según los datos de reciclaje de envases en los países donde ha sido implantado el SDDR, la recuperación se eleva hasta el 98%

Otro efecto que generaría este “nuevo” servicio de recogida sería la generación de nuevos puestos de trabajo (en torno a unos 15000) encargados de gestionar todas esas máquinas capaces de absorber la mayoría de los envases que se producen, y realizar la recuperación y clasificación de los materiales recogidos.1

Dentro de todo este baile de cifras, cada cual elige su pareja según su conveniencia y no pensando en la solución al problema. Cada año producimos y consumimos más plástico y por desgracia, también los océanos, mares, bosques, ríos o los estómagos de los anímales incapaces de digerirlos, y que son los principales afectados. Por muchas iniciativas individuales o colectivos que se promuevan para la limpieza de la “basuraleza”, se hace imposible acabar con todos los residuos producidos si no se adoptan medidas reales desde gobiernos nacionales y autonómicos, y así demostrar que las decisiones adoptadas van encaminadas a la protección del Medioambiente y no por intereses económicos.

Pero esto no quiere decir que nosotr@s nos quedemos al margen, ya que, ante el aumento de consumo de plástico, podemos buscar alternativas biodegradables para disminuir su consumo. Existen materiales elaborados a partir de fécula de patata utilizados para realizar las bolsas, o mejor aún, utilizándolas de tela que permiten más usos; o cubiertos desechables fabricados con fécula de maiz para cuando buscamos la comodidad. Pero lo realmente aconsejable es la reducción al mínimo del uso de plásticos y apostar por la reutilización de materiales biosostenibles y que sirvan de abono para la tierra o comida para los animales y no sea su sentencia de muerte como son los plásticos.

1 Según datos del informe de ISTAS ·”Estimación del empleo potencial en la implantación y desarrollo de la primera fase del SDDR en España”

Deja una respuesta

Volver arriba